No quiero escuchar la palabra rescate si no escucho primero secuestro.
El dinero no se le puede acabar a aquél que lo fabrica.
Te compro tu dinero y después te lo vendo, y me llevo una. Y esa una nunca me la podrás pagar porque habrás de hacerlo con mi dinero. Ah, ¿quieres dinero para pagar las mil y una unas que me debes? Pues cómpramelo, tonto. Pero que no se te olvide: me debes otra.
Leiv Motiv
Quiero pensar que es mentira que todo sea mentira; que no todo está perdido porque ocupemos el rol de perdedores ab initio. No obstante odio el esnobismo de los que bromean con "La teoría de la conspiración" como si fuera moderno ser conservadoramente imbécil, y elegantemente actual asumir que ser el enemigo del enemigo es, aplicando el denominador común, lo mismo que nada. Detesto a la gente que usa la expresión "las reglas de juego" por una razón tan obvia que espero no tener que explicarla. Éste no es un blog amigable. El mundo pone la sosa, yo intentaré poner el vinagre.
Des-cubrimiento!
ResponderEliminarChas gracias, Equilibrista desterrado del Circo Mundo...
Correcto.
ResponderEliminarMe alegro de verte por aquí.
Nos leemos!